domingo, 17 de marzo de 2013

Tres historias que siempre tengo presente.


Cartel ubicado en el ingreso de la Catedral Metropolitana


Terminamos el programa que conducen Lucas Carrasco y Zambayonny . Como todos los días, bajamos a fumarnos un cigarrillo en la puerta. Después cada uno sigue con lo suyo. 
En esta ocasión, me fui con Lucas a un bar que está en la esquina, almorzamos, tomamos una cerveza y cerca de las 16:45, volví a la radio para terminar algunas cosas.
Entro a la sala de Pre Producción y Gala, me dice – Viste? Bergoglio es el nuevo Papa!
Lo primero que pensé fue, que momentos bravos se nos vienen.
Nunca me gusto mucho la iglesia,  como estructura religiosa, ni de poder, ni de fe ni nada de eso que muchos veneran.
Tome la comunión? Sí. Ese mismo día decidí no volver a una iglesia, mas que por trámites que otros decidan realizar, arrastrados por cuestiones, normalmente costumbristas.


I
El cura  que me dio la  comunión se llama o se llamaba, Lucas Tessore. Éste, también debía hacer lo mismo con un grupo de amigos, pero con uno se negó.
Beto, tenía el pelo largo y ese fue el motivo por el que el impresentable Tessore lo excluyó de la ceremonia y solo le daría la comunión si   se cortaba el pelo y asistía  con sotana y ojotas como Jesús.
Me enteré cuando ingresé a la capilla.
Resulta que Pocho, el padre de Beto, entró a la iglesia y a los gritos  puteo al cura, como corresponde, pero entre tantas cosas que dijo, mencionó una que en ese momento, no sabía muy bien de qué se trataba, pero era importante y seria.
 Todo el mundo se dio vuelta y lo miró.
-          -Vos fuiste capellán de la dictadura y venís a discriminar a mi hijo. Hijo de Puta, Fascista y la re puta que te parió!-  . Gritó Pocho.
Pocho es uno de esos tipos con pinta de bueno, tranquilo. Al menos así lo recuerdo y  también  una de esas personas con las que es preferible no pelearse. Mide 1,9 Mts. espalda gigante y morrudo.
La cosa es que después de esa misa de las 11:00 AM  del domingo, alguien inició gestiones para que Beto tome la comunión. El tema llegó a la Catedral. El Arzobispo era Rómulo Garcia.
Para que todo no llegue a mayores, invitaron a Beto a la misa de las 19:00 Hs, el padre Diego le daría su primera comunión.
Ante el pedido de explicaciones sobre el comportamiento del Ex capellán de la dictadura,, desde la Catedral dijeron, "es un curita medio rebeldon".


II
Hace un par de años, en medio de  zapping, leí en el zócalo de un canal de TV , “Exclusivo, Polémico Libro de los Curas”. Eran imágenes de un canal de Córdoba,   las pasaban en  un canal de Buenos Aires.
Resulta, que el libro lo escribieron  cinco curas que se alejaron de la iglesia católica. Quien más habló en ese extracto fue Adrian VItali.  
Contaba que, cuando su actual mujer quedó embarazada, lo informó  a sus superiores  y muy tranquilamente le dijeron que no se haga ningún drama, simplemente debía desconocer a su hijo y la iglesia se encargaría de pagar la cuota alimentaria y él, sería destinado a otra localidad.
El relato de Vitali, no queda acá. Dijo, que ésta modalidad  se utiliza para sacerdotes con una vida sexualmente promiscua, con el corrupto (Por desfalcos  en parroquias o las diócesis  e incluso con el pederasta.

III
Mi cuñado es de apellido Mayer. Su madre era monja y la familia paterna tiene una larga tradición católica. Su tío Jorge Mayer, fue Arzobispo de Bahía Blanca.
Hace unos años, algunos medios bahienses dieron la noticia que el tío Jorge, estaba procesado  por colaborar en la última dictadura militar.
Elena Motechiari, Madre de Plaza de Mayo, de Bahía Blanca, recuerda cuando el entonces, Obispo Mayer, las echó de la catedral al grito de “Son tan Montoneros como sus hijos”.
La familia de mi cuñado, estaba un tanto sorprendida. 
No tenían trato con él, hacía mucho tiempo. La familia Mayer es muy numerosa y están dispersos por varias localidades de la provincia de Buenos Aires y La Pampa.
El tío Jorge, orgullo familiar y  portador del apellido, estaba procesado y ni más ni menos, que por entregar pibes y sacarles información mientras tomaba confesiones de detenidos y dar extremaunción  a quienes luego serían desaparecidos.
Mayer tuvo la suerte de que la muerte lo rescate de la justicia palpable y comprobable. La del hombre en tierra. La misma de la que podemos dar plena fe, en cuanto a la intención de imponerse, aun cuando estemos en desacuerdo con los resultados.

Estas tres historias, siempre las tengo presentes. Cada vez que alguien defiende a la iglesia como estructura, se me cruzan, aparecen, así como un alerta, como una acto de defensa que se interpone ante muchas costumbres y condicionamientos que uno lleva consigo, tan solo por haber nacido en un tierra en la que la iglesia se ha encargado de condicionar la vida de las sociedades y avasallado ciertas libertades individuales.